Hoy, actuó sin prisas ni apuro. Reconozco que el tiempo de Dios
es perfecto y que todo se puede realizar, armoniosamente, con
tranquilidad y equilibrio. Se que el tiempo alcanza para todo
lo que se hace serenamente y en Paz. No tengo por que intranquilizarme
por nada.
jueves, 31 de julio de 2008
14.- Realizar que el tiempo de Dios es perfecto.
Publicado por Violeta Paredes C. Matrona en jueves, julio 31, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario