17.- Bendecir el Cristo en las demàs personas.

Hoy, bendigo el Cristo Puro y Perfecto en cada humano que
contacte, lo reconozco, lo saludo y lo invoco a la acción;
para que manifieste la verdad, la belleza y la perfección
que a cada individuo corresponde.
Sé que el Cristo es un Maestro Ascendido que vela por cada
corriente de vida en particular, desde que llego en su
evoluciòn al nivel humano. Bendecir el Cristo en otro ser,
saludarlo y reconocerlo es una labor de Luz que abre las
puertas al Divino Poder, eleva y glorifica. Yo soy el Cristo
en acción que se expresa a plenitud en ti (decirlo silenciosamente
a cada persona). Te saludo, reconozco y te bendigo.